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Las Pymes son optimistas, pero no tomarán más personal (26/05/2017)
Las Pymes son optimistas, pero no tomarán más personal

Un relevamiento privado indica que las perspectivas del sector para este año mejoran, pero los empresarios creen que habrá menos rentabilidad y todavía no aumentarán sus planteles.

Un informe del Ieral de la Fundación Mediterránea sobre la realidad de las Pymes y micro Pymes. Según los datos obtenidos, el 49% de los empresarios a cargo de microempresas prevén que la inversión productiva de su empresa aumentará durante este año (34% moderadamente y 15% considerablemente), en tanto un 41% de los empresarios Pymes y esperan poder incrementar su inversión (28% moderadamente y 13% considerablemente).
En cuanto al ritmo de ventas proyectado, el 8% de las Pymes considera que aumentará considerablemente, el 53% reportó que aumentará moderadamente mientras que para el 28% el ritmo de ventas permanecerá constante. El 9% manifestó que disminuirá moderadamente y el 2% restante cree que disminuirá considerablemente.
Según las microempresas, uno de cada cinco encuestadas considera que las ventas se incrementarán de manera considerable durante 2017, otro 46% cree que aumentarán pero moderadamente. No obstante, del 34% restante, la mitad (17%) espera que el nivel se mantenga y, el resto, que baje (el 7%, mucho).
Al analizar la rentabilidad esperada en 2017, se observa que aproximadamente un cuarto de los empresarios MiPymes calcula una disminución respecto de 2016 (19% moderadamente y 4% considerablemente). El 33% piensa que se mantendrá igual y el 44% prevé que aumentará (38% moderadamente y 6% considerablemente).
Sobre cómo evolucionará el nivel de empleo. Según los resultados obtenidos, 54% de las microempresas y el 61% de las Pymes no espera aumentar el número de empleados durante este año. Y una de cada 3 microempresas (34%) y una de cada 4 Pymes (25%) estima aumentar la cantidad de empleados. Mientras que el 12% de las microempresas y el 15% de las Pymes considera que se reducirá el nivel de personal.
En los últimos años el empleo cambió fuerte: en 2011 un 55% de las firmas había incrementado su plantel; mientras que en 2012 ganó participación la porción de firmas que mantuvo su cantidad de ocupados. Ya en 2013, sólo una minoría incrementó su planta (16%) y se elevó la participación de las que redujeron (de 9% en 2012 a 24% en 2013).
Luego, entre 2013 y 2016 se observa una alta proporción mantuvo constante el nivel de empleo. De igual manera, se plantea una segmentación de respuestas relativas a aumentos y disminuciones de planta (posiblemente esta segmentación se deba a diferencias sectoriales).
Los cinco obstáculos más significativos que enfrentan las MiPymes en la actualidad son: presión tributaria, costos laborales, inflación, legislación y conflictividad laboral, y dificultades burocráticas (trámites). Hay que históricamente estos resultados alternaban de orden pero se mantenían estables.
Los autores del trabajo Marcos Cohen Arazi, Ana Laura Alonso y Lara Cerbán indican que en esta edición del relevamiento, los problemas variaron en relación a los do s últimos relevamientos donde figuraban en el top 5 los problemas financiamiento e incertidumbre macroeconómica.
En lo que se refiere a las principales fuentes de financiamiento de corto plazo con las que cuentan las MiPymes, factor clave para su desarrollo, en primer lugar se ubica el capital propio (34%), seguido por el financiamiento de proveedores, descuento de cheques y crédito privado (24%, 18% y 16% respectivamente).
En menor orden de magnitud, 5% de las empresas consultadas señaló como principal fuente el adelanto en cuenta corriente, 3% el crédito público y 1% subsidios específicos.
En el marco de la sanción de la Ley Pyme (promulgada en 2016), se estableció una batería de medidas en favor de las MiPymes, algunas de las cuales aún están siendo reglamentadas. De acuerdo con las firmas consultadas, se destacan algunos de los beneficios establecidos en la ley, por encima del resto (se toma como referencia la suma de aquellas que respondieron que implica un beneficio fuerte y/o moderado): deducción del 10% de las inversiones en ganancias (importante para el 64% de las empresas consultadas), la estabilidad tributaria (62%) y eliminación de la Ganancia Mínima presunta (para el 52% de ellas).
Así, del total de MiPymes entre un 50% y un 80% de las firmas no los solicitaron en 2016 ni tampoco en 2017 (ni prevén solicitarlos).

Fuentes: Diario Alfil