Desde hoy, la Provincia centrará los esfuerzos para efectivizar el desembolso de la mayoría de los créditos a tasa subsidiada y con seis meses de gracia que lanzó a través de Bancor.
El financiamiento bancario estatal va camino a convertirse en el principal salvavidas en materia de capital de trabajo para el universo Pyme cordobés afectado fuertemente por la paralización de la economía, fruto de la propagación del Covid-19.
Ayer, el gobernador Juan Schiaretti adelantó que el Gobierno provincial ya recibió pedidos para otorgar 4.500 millones de pesos a tal fin.
“Parte lo puso el Banco de Córdoba a sus clientes y parte la Provincia con su aval. Buscamos que siga funcionando la rueda de la distribución, de la producción y del consumo. Como esta medida, seguiremos tomando otras”, informó el titular del Panal, a través de las redes sociales.
En el Ejecutivo provincial calculan que el 60 por ciento del total de las plantillas de personal de las pymes de la provincia tendrá como auxilio este financiamiento subsidiado.
En Córdoba, hay algo más de 250 mil empleados que dependen de estas pequeñas y medianas empresas. El Centro Cívico estima que unas 80 mil personas cobrarán sus sueldos gracias a esta ayuda estatal.
“Hasta ahora se han recibido solicitudes por un unos 4.500 millones de pesos. Desde mañana (por hoy) comienzan a operativizarse esos préstamos para ser liquidados lo antes posible. Buscamos que sea lo antes posible para que las empresas puedan pagar sus nóminas salariales, que deben efectivizarse en los próximos días”, aportó a La Voz el ministro de Industria, Comercio y Minería, Eduardo Accastello.
Hasta el lunes a la tarde, antes del feriado, el Banco de Córdoba había recibido más de 2.500 solicitudes para la línea de préstamos extraordinaria.
Las pymes, así como los monotributistas de la categoría “C” en adelante, pueden pedir la asistencia crediticia a una tasa anual del 24 por ciento, sin comisiones, y por un monto de hasta una nómina salarial, de acuerdo a la declaración hecha en la Afip.
“El perfil de los solicitantes es muy heterogéneo”, comentó Accastello. Precisó que entre los anotados hay empresas de sectores críticos impactados por la cuarentena obligatoria y monotributistas con o sin empleados a cargo.
“Se trata de monotributistas –explicó el funcionario– que son empleadores y que son clientes del banco o monotribustistas desde la condición “C” que no están alcanzados por el bono de 10 mil pesos dispuesto por la Nación”.
“En el análisis de las solicitudes vimos que hay una fuerte demanda de este grupo de monotributistas. De categoría ‘C’ para adelante”, apuntó el titular de la cartera de Industria.
Fuente: La Voz del Interior
